Serra de Fontcalent

“Salvem Fontcalent” es una entusiasta asociación formada por algunos, pocos, pobladores de los alrededores de esta sierra, Rebolledo, Alcoraya, Bacarot, que se han empeñado en una lucha para recuperar la dignidad de una sierra que es absolutamente despreciada por los poderes públicos. La han convertido en una cantera que ha servido y sirve para erosionar nuestros espacios naturales en beneficio de especuladores-promotores que quieren transformar nuestras sierras –de todos- en apartamentos en la playa o en cualquier lugar donde se engaña a guiris o nacionales, el dinero es lo único internacionalista de verdad, prometiendo paraísos de ladrillos y cemento.

 

Los integrantes de la Asociación son estupendas personas, con su impronta de honradez e ingenuidad, nada para los Ortiz y compañía, buitres en un mundo en el que para ellos todo es carroña.

El domingo pasado convocaron la primera “Volta a Peu” en defensa de la Serra de Fontcalent.

Me había llegado la convocatoria por medio del correo del Cefire y esperaba ver a algunos de los que venían a las salidas porque se suponía que se había creado alguna conciencia, al menos referida al paisaje; pues bien, ni uno asistió. Así nos va…

Los organizadores, al menos los que yo conozco, Emilio, Jaume, Chimo,… tan contentos con que hubieran asistido más de cien personas a la convocatoria, eso si, pocos de la zona afectada, de los vecinos. Andamos todos tan ensimismados con “lo nuestro”, lo “absolutamente inmediato” que hemos cambiado lo trascendente por lo accesorio sin darnos cuenta.

Bueno, me pondré contento con los organizadores y diré que fue un éxito la convocatoria, que rodeamos la sierra (aprox. 12 kms.) como si quisiéramos abrazarla y hacerla nuestra, de todos.

Fontcalent además de ser una cantera depredadora al servicio de intereses bastardos, es expoliada por una empresa de nacionalidad suiza (Holcim) y como decía alguno de los participantes en la marcha: "seguramente no podrá ni poner la mirada en los Alpes suizos, tan bellos para ser fotografiados y para lucir en vacaciones…pero Fontcalent… si aquí no se aprecia..."

Bueno pues aparte de eso la sierra sirve como una especie de telón que oculta a la metrópoli todo aquello que quiere olvidar, por ejemplo la Planta de Residuos, construida con dineros de la Unión Europea y que hoy día acoge mucha más basura de la que puede tratar, algo a lo que se había comprometido; pero eso si, por cada tonelada que entra de otros lugares, tanto Inusa (léase Ortiz) como el propio ayuntamiento cobran un canon importante (32,17€ Inusa y 8,29€ el Ayuntamiento)…; también le da el nombre a la cárcel, tanto que el topónimo, si se hiciera una encuesta, seguro que lo reconocerían más por el recinto carcelario que por la orgullosa sierra que en medio de la llanura navega como majestuoso bajel entre L’Alacantí y el Baix Vinalopó; es un lugar donde descargar cualquier basura o residuo porque total esos campos abandonados para qué sirven…para dejar la mierda de una reforma que hacemos en casa, escombros, electrodomésticos,…; lodos, con su pestilencia…, el trazado del AVE, instalaciones deportivas del Hércules C.F.

Bueno, como iba diciendo rodeamos la sierra, Emilio nos dio breves pinceladas de su importancia, principalmente geológica y botánica.

Al llegar a la Font que le da nombre, las obras del AVE la han dejado semienterrada y para bajar hasta ella es necesario hacerlo por unos peldaños tan mínimos que corres el riesgo de sufrir un accidente en cualquier momento.

Enfrente de ella está el acceso a Holcim, normalmente cerrado con una valla y guardas de seguridad vigilando en el interior. Para nuestro gozo estaba abierta y el guarda nada, adelante, adelante, ¡qué generosidad!

Y un cuerno, toda esa “amabilidad” la había trabajado Emilio y otros que habían demostrado que aquel acceso es en realidad una vía pecuaria que atraviesa el recinto de unas canteras y que tienen la obligación de dejar el paso libre.

Después de contemplar el impresionante destrozo que le ha supuesto a la sierra la extracción de piedra, a pie de obra que impresiona más, seguimos la ruta para llegar hasta el Rebolledo, desde donde habíamos salido.